domingo, 17 de junio de 2012

Tengo esto para empezar (o algo sobre las panaderias)

Bola de l fraile hinchada de tanto dulce o leche reprimida
Suspiro de monja, consuelo de la vagina
Cañoncito apuntando al estado
Vigilante en la esquina parado
Panadero inmigrante inspirado
Que viva la anarquía dentro de las panaderías!
Que viva la anarquía dentro de esta pastelería gramatical
De acá para allá
Me pregunto una cosa
¿Todo lo que escriba desde hoy quedara guardado en el límite de este documento?
Digamos que me pregunto si estoy atrapado en lo que cuento
O puedo salir cuando quiero
Saltar un teclado y desviar mi escribir
Agarrar una hoja y no mostrársela a nadie
Este es el lugar donde puedo hacer lo que quiero
Poniendo nombres a las facturas, como los panaderos que amasaban el pan y le daban forma a la factura mientras se burlaban de la iglesia y del militar
Acá imprimimos libros, fabricamos espacios para que interactúen los vecinos
Sin lugar
Ni de acá ni de allá
Solo el presente que es este pie golpeando el piso al ritmo del punk rock
Solo el cielo despejado que hoy nos vino a visitar
Tras días de techo gris, quizás mañana el sol vuelva a salir
Porque la noche se puso azul oscuro
Y de lo lindo que es parecen dos cielos en lugar de uno
Jamás vi cielos como los que veo al viajar
Esos de horizonte eterno, de ruta y camino
De puñados de arboles amontonados en el mas allá
Verlo desde la parte de atrás de la camioneta
O sentado en la puerta que hay entre vagón y vagón del tren
O caminando por el costado de la ruta, esperando con el dedo levantado que alguien se cope y nos suba a su vehículo
Eso es el recuerdo que escribiendo hoy recreo
Porque el de hoy, el de acá, es el único cielo
El que salgo a la puerta y veo
Y esta bastante despejado
Iré hacia el
¿Quién quiere volar?
Yo!
¿Donde me debo remontar?
Aisito, al costado de la puerta
Espere el viento, serene la mente
Dejarse llevar es dejar de pensar
Ser panadero inmigrante, exiliado en la argentina y ponerle nombres tan interesantes a las facturas que comemos todos los días es inspirar
Que no se gasten los que quieren vender mentiras, desarrollamos la capacidad de leer entre líneas
Esto es un intento, nada particular
Solo que dicha anécdota me sentó a redactar
Y acá estoy, mirando de reojo al colchón
Me voy a soñar con esos panaderos que avivaron el fuego

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